El estudio se ha realizado en la Facultad de medicina de la UPV, y gracias a él, se ha descifrado el mecanismo antitumoral de una una planta originaria del Amazonas y que, según han podido comprobar, consigue acabar o matar a las células cancerígenas, sin afectar a las que están sanas. Esta planta ya era conocida por los científicos ya que durante siglos los indígenas ya la han empleado por su facultades antioxidante y antiinflamatoria. Ahora se confirmaría su poder antitumoral.