La víctima, que tenía una valoración policial de riesgo extremo en sus denuncias, ha presentado en el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) una queja contra el magistrado, el juez de Violencia sobre la Mujer número 7 de Madrid, Francisco Javier Martínez Derqui, por falta de imparcialidad, animadversión y posible delito de prevaricación. El magistrado instruye los procedimientos civiles y penales derivados del divorcio y de las dos denuncias presentadas por malos tratos psicológicos por amenazas y coacciones contra el exmarido.
En el vídeo oficial grabado por el Juzgado en la sala de vista, el juez la llama «bicho» e «hija puta». Se trata de una conversación que se produce una vez que terminada la vista de la demanda de divorcio para decidir las medidas sobre la custodia de los dos hijos, dos bebés de 21 y 10 meses.