El pasado 20 de noviembre se acogió a su derecho a no declarar, dado que desconocía el contenido de la acusación por estar bajo secreto. En los pasillos de los juzgados, aseguró a los periodistas que era «inocente» y que «no había matado a nadie».Uno de los principales indicios incriminatorios sería el testimonio del taxista que trasladó a Román a la nave donde se halló la maleta con el torso de la novia en el interior. El taxista habría confirmado a la Policía que el hombre trasladaba una maleta muy pesada.