Han dicho que están cansados de que se legisle a favor de las grandes cadenas comerciales y multinacionales e intenten engañarlos de que de esta forma aumentará el consumo en el pequeño comercio si abren los domingos y festivos.
Ven peligrar al sector del comercio de alimentación porque las grandes cadenas han instaurado un modelo abierto todos los días del año y se muestran preocupados porque se hayan sumado pequeños comerciantes.