La medida llegará al Consejo de Ministros la próxima semana y busca fomentar la resolución extrajudicial de conflictos en materia civil y mercantil. Recordemos que la mediación es un proceso en el que interviene un profesional neutral, que busca un acuerdo para evitar llegar hasta juicio. Se trata de resolver determinados asuntos de forma más eficaz, ágil y barata, y de paso, evitar colapsos en los juzgados.
La ley en la que se trabaja no entraría en vigor hasta tres años después de su publicación en el BOE y en ningún caso se obligará a la mediación si se ha instruido un procedimiento previo por violencia de género.