La Fiscalía y los acusados por el accidente de Metro de Valencia de 2006, en el que murieron 43 personas y otras 47 resultaron heridas, han alcanzando un acuerdo, después de semanas de negociaciones, por el que admiten los hechos a cambio de una reducción de la pena, por lo que no habrá finalmente juicio. El acuerdo contempla que cuatro de los procesados quedan exonerados y otros cuatro aceptarán penas de 22 meses de prisión, aunque no entrarán en la cárcel. En las negociaciones también ha participado la Asociación de Víctimas, que estaba a favor de la conformidad y que ha señalado que con este pacto se reconoce que lo corrido no sólo fue culpa del conductor del metro.