De la mano de EKI, la energía eléctrica llega a los centros de salud,escuelas y diversas organizaciones en África de la mano de EKI una fundación que desarrolla un innovador modelo para suministrar energía eléctrica sostenible con paneles solares fotovoltaicos.
En el mundo un 40% de la población mundial depende de fuentes de energía insalubres para poder cocinar en sus hogares y una de cada 7 personas no tiene acceso a la electricidad
La fundación EKI asume los intereses de los inversores tanto públicos como privados para que los destinatarios del África sushahariana no tengan pagar más que la instalación sin intereses durante 20 años. El coste de una instalación ronda los 15.000 e. Esta fundación está apoyada por el Ente Vasco de la Energía que invertirá unos 300.000 euros en este proyecto que tiene como principal objetivo no llevar tecnología caduca y contaminante a países en vías de desarrollo.
Iñigo Ansola, director general del EVE, y José Galíndez nos dan más detalles del proyecto: