Las estadísticas mensuales del aeropuerto de Bilbao son las más negativas en su historia al publicarse los registros del mes de abril. En plena pandemia y con el tráfico aéreo paralizado, La Paloma tan solo gestionó 1.415 pasajeros que aterrizaron o despegaron en aviones practicamente vacíos.
Esta cifra supone un descenso del pasaje del 99,7% con respecto al mismo mes de abril del pasado año en el que la terminal de Loiu acogió 526.329 viajeros.
El número de operaciones también descendió a mínimos históricos. Se registraron 248 aterrizajes y despegues los que implicó una caida de un 94,6% con respecto al mismo periodo de 2019. Nunca jamás antes el aeropuerto de Bilbao había protagonizado estos guarismos obligados por la paralización de la movilidad aérea