El uso de mascarillas no produce hipoxia o déficit de oxígeno en el organismo humano, como se asegura en algunos mensajes difundidos por WhatsApp y redes sociales en los que se afirma incluso que su utilización provoca intoxicación por inhalación del propio CO2. Esto es completamente falso.
En estos mensajes se afirma que el uso prolongado de la mascarilla produce hipoxia, porque obliga a inhalar el dióxido de carbono previamente exhalado y ello provoca falta de oxígeno en sangre, mareos, malestar y mucho cansancio. No es verdad. Los expertos lo tienen claro: las mascarillas pueden generar sensación de ahogo, pero no hay ninguna evidencia que indique que su uso produzca hipoxia, ni nada parecido. Recuerdan que no están cerradas al paso de aire, ya que el material de la que están hechas permite que entre el oxígeno y se elimine el CO2.