Según un informe del CSIC sobre la transmisión del Covid 19 en playas y piscinas advierte de que la cloración del agua y el PH facilita la muerte del coronavirus por su acción desinfectante.
Pero ojo, porque la cloración y el PH del agua de las piscinas desactivan el coronavirus pero en cantidades superiores a las recomendadas puede ser dañino para los ojo. Entre las medidas de prevención que este verano habrá que extremar en las piscinas pueden ser utilizar gafas de bucear o aclararse los ojos con el agua de la ducha después del baño. Además, hay que recordar que la utilización de lentillas en el agua, principalmente en las piscinas, puede provocar multitud de infecciones oculares. Es importante si surge algún problema, no automedicarse con colirios sin la supervisión de un especialista. Y acudir al oftalmólogo en el momento en el que se empiecen a notar los primeros síntomas para tratarlo lo antes posible.
