El 90% de los pacientes recuperados de COVID-19 de un estudio realizado en Islandia, mantuvieron niveles estables de anticuerpos contra el nuevo coronavirus hasta 4 meses después de superar la enfermedad. Pero no todos somos iguales ante el coronavirus. En lo que respecta a la edad, los niveles de anticuerpos fueron más altos en pacientes mayores y en aquellos en los que la enfermedad les ha hecho estar en una situación más grave. En cuestión de sexo, las mujeres tenían niveles de anticuerpos más bajos en comparación con los hombres.
El índice de masa corporal se correlacionó positivamente con los niveles de anticuerpos; los fumadores y usuarios de medicación antiinflamatoria tenían niveles más bajos de anticuerpos. Con respecto a las características clínicas, los niveles de anticuerpos estuvieron más fuertemente asociados con la hospitalización y la gravedad clínica, seguidos de síntomas clínicos como fiebre, tos y pérdida de apetito. La gravedad de estos síntomas individuales, con la excepción de la pérdida de energía, se asoció con niveles más altos de anticuerpos.