Las fiestas navideñas, por lo general, son una época especial para celebrar con los más allegados. Es también un momento para el reencuentro con los mayores, un grupo muy numeroso en España. De hecho, según el Instituto Nacional de Estadística hay casi dos millones de personas con más de 65 años.
Sin embargo, uno de cada cinco ancianos pasa las Navidades completamente solo, ya sea porque no tiene relación con sus familiares (32%), su familia se va viaje (21%), sus allegados no viven en España (15%) o directamente porque no tienen un familiar directo (12%), según un reciente estudio de ThyssenKrupp.
Además, este año va a ser especialmente difícil para este colectivo, ya que aparte de ser el más castigado por el coronavirus, las restricciones de la pandemia va a dificultar aún más si cabe sus reuniones familiares.
La soledad de los mayores en Navidad es una sombra que planea sobre los hogares de cientos de miles de ancianos socialmente aislados y al margen de las celebraciones familiares que son tan comunes en esta época del año.
La propia Organización Mundial de la Salud alerta de que la falta de atención es un factor a tener en cuenta porque fortifica el deterioro físico y psíquico de las personas mayores. Demostrarles el cariño y que se sientan queridos tiene que ser habitual durante todo el año, con especial sensibilidad en una época tan señalada como la Navidad.