Un total de 10 agentes cívicos, 8 mujeres y 2 hombres, conforman el servicio de Agente Zibikoak-Agentes Cívicos, que desde el pasado 7 de enero recorren a diario las calles de Basauri, uniformados/as, para colaborar y asistir a la ciudadanía. Mediante el programa de apoyo al empleo local cofinanciado por Gobierno Vasco, a través de Lanbide, y el Ayuntamiento de Basauri, el Consistorio basauritarra ha contratado a estos diez agentes cívicos y a una supervisora durante un periodo de 6 meses, bajo la responsabilidad y supervisión de la Policía Local, una iniciativa que pretende acompañar en la incorporación al mercado laboral a quienes han estado alejados del mismo durante una larga temporada. Desde las 08:00 de la mañana hasta las 14:30 y desde las 15:30 y hasta las 20:00 de lunes a viernes, transitan por el término municipal en tareas informativas, de auxilio a la ciudadanía y de apercibimiento ante los incumplimientos a la normativa existente.
Entre el 28 de diciembre de 2020 y el 5 de enero 2021, todos ellos/as han recibido una formación previa impartida por responsables de la Policía Local sobre aspectos como el callejero urbano, las ordenanzas municipales, medidas de autoprotección, normativa de tráfico, normativa sobre convivencia y resolución de desavenencias entre particulares, además de los decretos relacionados a las medidas para frenar el COVID-19. Asimismo han recibido formación práctica sobre la regulación del tráfico y la resolución de conflictos.
Según Sergio Moral, Agente 1º de la Policía Local y uno de los responsables encargados de la formación, “hemos tratado de dotarles de las destrezas necesarias para que puedan realizar su labor diaria con la garantía suficiente de que ofrecen un buen servicio y paralelamente se garantice su seguridad y la de terceras personas”. “Han mostrado una actitud muy positiva, se les ha inculcado el afán de servicio público, el trabajo en equipo o la empatía hacia los problemas de la ciudadanía. La parte que más les ha costado ha sido la práctica de la regulación de los pasos de peatones, pero se han esforzado y han logrado adquirir las destrezas necesarias para ofrecer un servicio de calidad a la ciudadanía basauritarra”, añade.
Tras la primera formación, la Policía Local ha establecido los objetivos y tareas que debe cubrir este servicio con el fin de atender a la ciudadanía de la información local que requieran, concienciar y apercibir a aquellas personas que de forma incívica e irresponsable incumplan las medidas de contención del COVID-19, la vigilancia de las ordenanza municipal sobre limpieza, ocupación y uso del espacio público, el buen uso del mobiliario urbano, la Ordenanza Reguladora de la Tenencia y Protección de Animales, así como el apoyo a las familias en las entradas y salidas de los centros escolares mediante la regulación de los pasos de peatones. Además, apercibirán a aquellos conductores que de forma irresponsable cometan infracciones graves, lo que pondrán de inmediato en conocimiento de la Policía Local.
En todo caso, el servicio de vigilancia cívica del Ayuntamiento de Basauri no dispone ninguna potestad sancionadora, por lo que en caso necesario comunicaría a la Policía Local para asumir esa tarea, con un trabajo conjunto y coordinado que servirá para ofrecer una mayor atención a las y los basauritarras.
Desde que el pasado 7 de enero comenzasen a vigilar las calles de Basauri, estos/as agentes han cubierto más de 200 intervenciones de todo tipo. La mayoría han sido relacionadas con apercibimientos e información sobre las medidas de prevención del COVID-19. También han estado en contacto directo con los/as hosteleros para informarles de distintas cuestiones preventivas. Por otra parte. 42 actuaciones se corresponden con la regulación de pasos de peatones en los centros escolares que más lo requieren y el resto han sido labores informativas y de asistencia a la ciudadanía.
Según Eva Moral, subjefa de la Policía Local y una de las formadoras de los agentes cívicos, han percibido que la acogida de las y los vecinos de Basauri ha sido muy positiva. “Les preguntan por sus funciones, les agradecen la atención, incluso cuando son apercibidos, porque están prestando un gran servicio al municipio, la verdad que la acogida ha sido muy buena. Además están adquiriendo una serie de habilidades personales que queremos que puedan utilizar y ponerlas en valor una vez terminado el programa para un retorno más fácil al mercado laboral: el trato directo al público, el trabajo en equipo, el afán de servicio, la redacción de documentos e informes, aplicación de las TIC, etcétera”, explica. La previsión es que cubran más de 3.000 actuaciones en los 6 meses de trabajo, especialmente las concernientes al control de los flujos de entrada y salida de peatones en los centros escolares así como el cuidado de las restricciones decretadas para prevenir la expansión del COVID-19.
Sus uniformes de color azul y gris ya están empezando a ser reconocidos por la ciudadanía de Basauri. Además del logo Agente Zibikoa, llevan incorporado el emblema del ayuntamiento en todo el vestuario laboral y en los chalecos y disponen de teléfonos móviles para contactar en caso de necesidad, bien con su supervisora o con la Policía Local.