La Diputación de Bizkaia comienza este lunes las obras en Plaiabarri, dirigidas a aliviar la congestión del tráfico en el entorno de Rontegi. Para ello el ente foral invertirá 2,6 millones de euros.
En concreto se va a remodelar el punto donde actualmente convergen el corredor del Txorierri y La Avanzada, eliminando esta convergencia y dando continuidad y fluidez a los cuatro carriles procedentes de ambos troncos hacia el puente de Rontegi. El objetivo es aumentar la capacidad de la carretera BI-30 (antes N-637) en ese tramo, uno de los que mayor intensidad de tráfico soporta de toda la red foral de carreteras.
Esta actuación se completará con la reposición de la capa de rodadura de toda la zona afectada por las obras; la reposición de las defensas; la implantación de una barrera rígida de hormigón en la mediana, para proteger los nuevos pórticos implantados recientemente en la calzada opuesta; la reposición de la iluminación; la reposición de las canalizaciones de fibra óptica; la ejecución de un muro anclado de 112,5 metros de longitud y 3 metros de altura para verticalizar el talud derecho en la zona ampliada sin aumentar la ocupación de terrenos; y la revegetación de la zona.
Durante la ejecución de estos trabajos se hará especial hincapié en causar las menores afecciones posibles al tráfico, manteniendo el número de carriles actuales con una anchura mínima de 3,30 metros.
Esta actuación se suma a otras dirigidas a paliar la elevada intensidad de tráfico que soporta el entorno de Rontegi hasta que entre en servicio el túnel bajo la ría, previsto para 2028.