Las viviendas vacías se han incrementando durante la pandemia un 16% en Bilbao, de manera que han pasado de los alrededor de 4.500 pisos que había antes de la crisis sanitaria a superar este mes de enero los 5.200.
Es lo que indica un reciente estudio revela que los arrendadores señalan como principales causas para mantener sus viviendas vacías la «inseguridad jurídica» existente en la actualidad a la hora de ponerlas en alquiler y los cambios legislativos que «desprotegen a los propietarios». También se cita, como motivos acentuados por la pandemia, la dificultad de encontrar inquilinos solventes y «la escasa rentabilidad que ofrece la vivienda de alquiler en pisos sin rehabilitar». No obstante, la demanda para vivir de alquiler sigue al alza.