La autopsia clínica realizada a la profesora de Marbella que murió por una hemorragia cerebral dos semanas después de recibir la primera dosis de AstraZeneca apunta a que la vacuna contra el covid no está relacionada con la muerte.
Los médicos han detectado que la mujer, de 43 años, tendría una predisposición a sufrir un accidente cerebrovascular. La hemorragia que le causó la muerte pudo ser provocada por la rotura de un vaso sanguíneo en el cerebro, lo que se conoce como aneurisma.