El compositor y pianista oñatiarra Juan Carlos Irizar falleció ayer jueves a los 69 años dejando un extenso legado musical en el que destacan más de una treintena de discos y composiciones para películas, ballets y festivales.
A lo largo de su carrera ha ejercido tanto de director como de profesor, compositor y pianista. Fue también titular del órgano de varias parroquias guipuzcoanas, entre ellas las de Oñati y Jesuitas de San Sebastián. Además, dirigió coros como la Schola Cantorum de San Sebastián y Zaldetoa de Galdakao.
Irizar fue autor de más de 30 discos de música instrumental romántica, una docena de libros de partituras, infinidad de composiciones musicales para teatro, televisión, documentales, películas, mundo infantil y pedagógico, bandas e himnos.
Lo que proporcionó cierta popularidad a Irizar, sin embargo, fue su labor como pianista y compositor de música popular.
Hombre vitalista, dedicó uno de sus discos, titulado ‘Los colores de la vida’, a celebrar el hecho de estar vivo. «Es un disco que pretende ser una celebración de la vida y sus colores, de la luz y de las muchas cosas hermosas que tiene el mundo en que vivimos, de ahí el título».
El último disco lo dedicó a la figura femenina. Se titula ‘Mujeres que me inspiran’ y lo presentó hace dos años en el Aquarium con la presencia de mujeres como Edurne Pasaban, Ángela Vilariño, Leire Olaberria, Maialen Chourraut y la veterana cantante María Ostiz.
