La conexión entre la Supersur y la AP-68 es aún más visible tras la colocación este pasado fin de semana del viaducto que une el túnel de Seberetxe con la autopista que conecta Bizkaia y la meseta. El diputado de Infraestructuras y Desarrollo Territorial, Imanol Pradales, se ha acercado esta mañana para comprobar cómo se estaba desarrollando uno de los grandes hitos constructivos de la infraestructura. «La colocación del viaducto sobre la AP-68 es un gran hito en el desarrollo de esta potente infraestructura. Los 195 metros de viaducto sirven para visibilizar la conexión entre la Supersur y la AP-68. Hoy podemos ver por primera vez la conexión con la meseta que necesita Bizkaia. Particularmente el tráfico de mercancías que viene del Puerto de Bilbao. Este tablero conecta el puerto, el aeropuerto, el BEC, los parques tecnológicos y las empresas del territorio de manera rápida y en alta capacidad a la meseta. Va a ser un eje fundamental de comunicaciones terrestres para el territorio», ha subrayado.
La colocación del viaducto no está exenta de dificultades técnicas, ya que sus 195 metros de longitud sobrevuelan la AP-68 sin apoyos en su mediana. Para la construcción del viaducto se ha utilizado 750 tn de acero estructural. Además, ha sido necesario instalar 5 apeos metálicos, que han posibilitado el montaje de la estructura metálica en 7 tramos. El diputado ha explicado que quedan meses de trabajo por delante para completar los trabajos que se desarrollan en esta parte de las obras, el conocido como tramo 9b, que incluye los túneles de Seberetxe y el enlace de Venta Alta.
Estos días se está procediendo además a «sustituir» la pila que soporta el acueducto que conecta los túneles de Seberetxe con la AP-68. La nueva pila consiste en una estructura de 8,5 metros de altura, empotrada en un pedestal de hormigón de 5,5 metros de altura. Una de las singularidades de esta estructura es el proceso adoptado para la maniobra de transferencia de cargas entre la pila a demoler y la nueva estructura.