El diputado de Infraestructuras y Desarrollo Territorial, Imanol Pradales, ha llevado a las Juntas Generales del territorio una propuesta para poner en marcha un sistema de pago por uso que incentive a los grandes camiones de más de 3,5 toneladas a utilizar las vías de alta capacidad: «un sistema altamente implantado ya en toda Europa que se ha demostrado eficaz y va a contribuir decididamente a reducir las consecuencias negativas de los desequilibrios que se producen actualmente en vías como la N-240, BI-625 y el Corredor de Txorierri, así como a reducir las emisiones de CO2 y mejorar la seguridad en la red viaria», ha avanzado.
«La Unión Europea ya ha marcado el camino a los gobiernos para implementar una movilidad limpia, competitiva y sostenible. Y las propias Juntas Generales de Bizkaia ya instaron en 2019 al ejecutivo foral a resolver las disfuncionalidades detectadas en la red viaria de Bizkaia a través del documento de Directrices y Criterios Generales para la elaboración del Plan Territorial Sectorial de Carreteras«, ha explicado Imanol Pradales. El diputado ha recordado que ese documento recoge la necesidad de poner en marcha un modelo que permita una utilización más racional de la red; internalizar los costes externos derivados del uso indebido de las infraestructuras por parte del tráfico de vehículos pesados; recuperar los costes de conservación y gestión de las carreteras (88,6 millones de euros al año en Bizkaia), y garantizar la igualdad de oportunidades independientemente del origen/destino de las mercancías.
La mayor parte de los gobiernos europeos ya aplica sistemas de pago por uso al transporte pesado. Y las instituciones comunitarias han ido aprobando en los últimos años normativas que defienden los principios de «quien usa, paga» y «quien contamina, paga». En concreto, la directiva 2011/76/UE ya regula la aplicación de gravámenes a los vehículos pesados de transporte de mercancías a fin de reducir las repercusiones negativas o externalidades de este tipo de transporte. «Para abordar esta transición hacia una movilidad más sostenible y ordenada es necesario utilizar el instrumento que se aplica en el conjunto de la UE. Ese instrumento es el sistema del pago por uso. Y supondrá aplicar un canon a los vehículos pesados utilizados para el transporte de mercancías por carretera y con un peso superior a 3,5 toneladas», ha explicado el diputado.
El sistema prevé la colocación arcos de control con sistema free-flow, equipados con detectores de tránsito e identificadores de vehículos para poder aplicar un canon sin necesidad de detener el tráfico. Los arcos destinados exclusivamente a los grandes camiones van a instalarse de manera gradual en las siguientes vías: N-240, BI-625, N-636, A-8 y Txorierri. «Estimamos que será necesaria la instalación de manera gradual de cerca de una treintena de arcos de control en las carreteras citadas. Quiero insistir en este punto: debemos encontrar un buen equilibrio entre el uso eficiente de la red de carreteras, su reordenación y la competitividad del sector del transporte de mercancías en Bizkaia, que no debe verse penalizado», ha subrayado Pradales.
Asimismo, el diputado ha insistido en que «para transitar hacia el nuevo modelo es necesario debemos contar con la luz verde europea y debemos aplicarnos para tramitar la Norma Foral en estas Juntas Generales. Y asumiendo el cumplimiento de ambas cuestiones previas, el sistema podría entrar en funcionamiento, al menos parcialmente, en otoño del próximo año 2022». Es fundamental hacerlo de manera consensuada, gradual y teniendo en cuenta las necesidades del sector.