En Euskadi la cuarta parte de los municipios ya no tienen sucursales bancarias ni cajeros. Por ello, muchos vascos se quedan sin un servicio esencial y tienen que recorrer varios kilómetros para realizar algunas transacciones.
Es cierto que cada día se utiliza menos el dinero en efectivo y las entidades bancarias apuestan más por acelerar el proceso de digitalización. Esto conlleva al cierre de sucursales y a la desaparición de cajeros, y por tanto al despido de miles de empleados, concretamente 15.000 este año en España.
De esta forma 30.136 ciudadanos vascos no tienen la posibilidad de sacar dinero en efectivo a menos de 5 kilómetros. 60 de los 251 municipios no cuentan ni con sucursal ni con cajeros. solo entre 2008 y 2017 se cerraron el 31,1% de oficinas bancarias, y se espera que cada vez sean más.