Los viaductos sobre el Bolintxu se construirán sin usar apoyos ni maquinaria en el valle. El diputado de Infraestructuras, Imanol Pradales, ha informado de que las obras de la segunda fase de la Supersur marchan en plazo y la conexión con la AP-68 podrá estar operativa en la primera mitad de 2023.
El diputado ha recordado que se trata de una obra de gran magnitud y con la complejidad añadida de que los trabajos están condicionados por la especial importancia medioambiental del entorno del Bolintxu. El paso sobre el arroyo de Bolintxu se construirá casi en el aire. Para evitar colocar columnas o pilastras que dañen el valle se tenderán en paralelo dos viaductos (en sentido Cantabria 162 metros de largo y en dirección Vitoria 148). La peculiaridad es que se generarán ambos pasos por un sistema de abatimiento tras construir previamente cada parte del arco que los sostendrán en cada uno de las laderas donde desembocará el nuevo vial.