Azkuna Zentroa, Centro de Sociedad y Cultura Contemporánea del Ayuntamiento de Bilbao, inicia el año de su Zinemateka 2022 con un ciclo dedicado a Iciar Bollaín, como paradigma de una generación de directoras que abrieron brecha y con la que el cine español ha adquirido un carácter transnacional.
Del 12 de enero al 24 de marzo la Zinemateka programa las cintas de esta cineasta que nos acerca a un cine de lo real desde la sensibilidad y la sororidad. El recorrido por su filmografía arranca con su primer largometraje Hola, ¿estás sola? (1995) y finaliza con Maixabel (2021), su último trabajo, galardonado con el Premio Irizar de Cine Vasco en el Festival de Cine de San Sebastián.
Hablar de Icíar Bollaín es hablar de vocación por contar historias que conectan con el público, historias con las que la directora se acerca de una manera empática a la vida de las personas. Icíar Bollaín es una mujer comprometida con la sociedad, que ve en el cine un instrumento de concienciación y cambio social. Sororidad y empoderamiento femenino se han relacionado con su trabajo incluso antes de que adquirieran la notoriedad actual.
Todo ello sesta presente en su extensa filmografía que este ciclo aborda desde su ópera prima Hola, ¿estás sola? (1995) que muestra las vidas de dos chicas jóvenes con un pasado carente de afecto y un presente y futuro inciertos.
Con este largometraje Icíar Bollaín inicia una serie de historias protagonizadas por mujeres como Flores de otro mundo (1999), Te doy mis ojos (2003) y Mataharis (2007), en las que se visibilizan diferentes situaciones de vulnerabilidad por el hecho de ser mujeres.
También la lluvia (2010) puede parecer a priori alejada de esa línea pero sigue siendo, como dice la propia directora, un cine de personajes pero más grande. Rodada en Bolivia y preseleccionada para los Óscar, supone el comienzo de la colaboración con Paul Laverty que les llevará de la mano en trabajos como Katmandú. Un espejo en el cielo (2011), El olivo (2016) o Yuli (2018).
En La boda de Rosa (2020), Bollaín recupera parte del espíritu libre que plantea con su primer largometraje, en la figura de una Candela Peña, que en parte es un canto a ser una misma, a ser dueña de tu propia vida y responsable de tu propia felicidad. El ciclo finaliza con su último largometraje hasta la fecha, Maixabel, un recorrido y un viaje personal que llevan a cabo los protagonistas, víctima y verdugo, y que les lleva a sentarse cara a cara y hablar de sus sentimientos.