Esta mañana el Casco Viejo ha dado el paso definitivo para convertirse en una zona de preferencia peatonal. La medida perseguida por el Ayuntamiento desde hace años se implanta ahora después de limar asperezas con los sectores más afectados: comerciantes y hosteleros, pero también vecinos. Las siete calles se blindan al paso de vehículos y solo aquellos que hayan solicitado el permiso cumpliendo con los requisitos podrán entrar en un horario y cuatro días al mes.
A partir de hoy el máximo de accesos permitido para residentes y comerciantes es de 48 al año, 4 al mes, con un máximo de 30 minutos por acceso.
El horario es de 8:00 a 11:00 horas de lunes a domingo, de lunes a jueves laborables de 21:00 a 23:00 horas, y domingos o festivos entre las 18:00 y las 23:00 horas.