Esta semana han comenzado las obras de reforma para adecuar el Centro Asistencial Elorrio, dependiente del Instituto Foral de Asistencia Social, al modelo residencial futuro que está impulsando la Diputación Foral de Bizkaia. Se trata de organizar el centro en unidades convivenciales que favorezcan una atención más personalizada, abiertas a la comunidad y que den respuesta a las diversas necesidades, deseos y expectativas de las personas que requieren de apoyo, respetando sus derechos y su identidad biográfica.
En concreto, la residencia de Elorrio se estructurará en dos unidades de convivencia que albergarán, cada una de ellas, a un máximo de 25 personas. Así, cada unidad contará con 22 habitaciones (19 individuales y 3 dobles) y zonas comunes de convivencia en cada una de las unidades, de tal forma que las y los residentes puedan continuar con su proyecto de vida en un entorno doméstico, lo más parecido a un hogar.
En la primera fase de las obras se abordará la reforma de los salones de las dos plantas de las que consta el edificio para habilitar espacios comunes de mayor tamaño, hasta prácticamente duplicar las dimensiones actuales. A los nuevos salones se les dotará de una cocina doméstica abierta e integrada a la zona de comedor y nuevos aseos.
Las obras de acondicionamiento y mejora del centro se realizarán de manera progresiva, ya que las mismas se tienen que hacer con las personas residentes y profesionales viviendo y trabajando en el centro. En este sentido, se adoptarán todas medidas necesarias para minimizar las posibles afecciones que pudieran ocasionar. De hecho, en esta primera fase, el personal de obra no circulará por los accesos y pasillos habituales del centro, habilitándose accesos específicos desde un ventanal, evitando entradas por la residencia que seguirá en uso. La previsión con la que se trabaja es que finalizada esta fase inicial y preparatoria las obras de la primera unidad de convivencia se inicien en la primera mitad del año que viene y, una vez terminadas, arranquen las de la segunda junto a otras reformas en el exterior del edificio.
Se espera que la transformación completa del centro en unidades convivenciales esté concluida a principios de 2025 con un coste de 4,5 millones de euros.