El Ayuntamiento de Barakaldo comienza esta semana a instalar los detectores de humo que permitirán reducir riesgos en el hogar de las personas mayores de 80 años que viven solas en la ciudad. Mikel Antizar, concejal de Acción Social ha anunciado esta mañana el inicio de este proyecto gratuito con el que además se busca detectar en estos hogares posibles situaciones de fragilidad social y soledad no deseada. Según el padrón barakaldés, más de 2.500 vecinos y vecinas de más de 80 años vivirían solas en la ciudad. Además, el proyecto contempla la elaboración de un estudio de necesidades sociales de las personas destinatarias del servicio, que servirá para continuar mejorando los servicios que se ofrecen desde el Área de Acción Social.
Según datos de SOS Deiak, 8 de cada 10 accidentes domésticos son incendios y las personas mayores con movilidad reducida son las más frágiles en una situación de este tipo, ya que debido a las alteraciones sensoriales suele costarles más darse cuenta de que algo pasa y tardan más tiempo en reaccionar.
Los y las vecinas no deben hacer nada. De hecho ha sido el Ayuntamiento quien se ha puesto en contacto ya con ellos y ellas. La instalación de los detectores de humo es completamente gratuita y no requiere de obra. En el momento en el que se detecte humo, el sistema avisará de su presencia mediante una alarma sonora muy fuerte. De esta manera se busca no solo que lo puedan escuchar las personas usuarias, sino también sus vecinos y vecinas. “La alarma permite reducir los tiempos de alerta para salvar vidas y también minimizar los daños en la vivienda. Además, son aparatos autónomos, que funcionarán con una batería, lo que permite contar con una pequeña central de emergencias sin necesidad de obras”, ha matizado Antizar.
Además, también se ofrecerá a los y las usuarias de este servicio un estudio de su propia vivienda en el que se analizarán los aspectos relacionados con el entorno físico de la misma (estado de conservación y accesibilidad tanto del edificio como de la vivienda), se identificará dentro de la vivienda los posibles focos de riesgo de incendios derivados del mal estado y conservación de las instalaciones de gas, calderas, instalación eléctrica, ventilación, estufas, cocinas y demás equipamientos y se procederá a la instalación completamente gratuita de los detectores de humo.
Por último, se realizará una valoración de la autonomía y detección de deterioros cognitivos, sensoriales, de movilidad, aislamiento social, apoyos familiares o de la comunidad y otras necesidades sociales y de autonomía de las personas mayores
