El Ayuntamiento de Bilbao desarrolla un programa piloto para ofrecer una alternativa a familias en situación de riesgo o exclusión, sin vivienda y con menores, que precisan de una solución temporal a sus problemas de alojamiento.
El Alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, se ha acercado en las últimas semanas hasta esta residencia para conocer su funcionamiento y el modelo de intervención que se les está ofreciendo a las siete familias que ahora mismo conviven.
Desde mayo de 2022, el Consistorio cuenta con este recurso de intervención socioeducativa y de carácter comunitario, que ofrece, por una parte, alojamiento a familias bilbainas con menores a cargo, que se han visto privadas de su residencia habitual por un proceso de desahucio o pérdida de su vivienda habitual; y, por otra parte, una intervención socioeducativa que les ayude y les apoye en el proceso de salida de la situación que están viviendo y en el acceso a otro tipo de recursos residenciales.
Con este programa, además, se persigue proporcionar seguridad a las familias, para que recuperen, mantengan y desarrollen las competencias personales, la autoestima, la confianza y las habilidades necesarias, para que en un futuro puedan desarrollar una vida autónoma.
Estas instalaciones cuentan con 10 habitaciones que son ocupadas por las familias, que comparten cocina, espacio de estar y baños. Desde sus inicios, la residencia ha acogido a 12 familias, un total de 32 personas.
La residencia social es un recurso que sustituye al dispositivo residencial de urgencia en el que son alojadas, por otro más adecuado para familias con menores de edad, que, en el momento oportuno, les permita transitar de un recurso tutelado a una autonomía residencial a la que toda la ciudadanía tiene derecho.