Barakaldo ha presentado un presupuesto de 130 millones de euros para su aprobación, y con el que afianzar la segunda gran transformación social y urbana de la localidad, con el foco puesto en los servicios públicos y el gasto social. Este presupuesto en un 6% más alto que el del año anterior.
Se trata de unas cuentas públicas ambiciosas, con una agenda urbana que marca 11 líneas estratégicas, alineada con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que no piensa tanto en el cemento, sino en los servicios, las necesidades y la conexión de todos los barrios, recuperando además el espacio de la ría para el disfrute de la ciudadanía.
Este presupuesto se ha creado teniendo en cuenta la congelación de impuestos por tercer año consecutivo, y el fondo de ayudas sociales de casi 3 millones de euros. El 2023 se afrontará con uno de los niveles de endeudamiento más bajos de la historia. La partida para amortización de préstamos será tan solo de 50.000 euros.