Ante la aparición en varios puntos de Galdakao del comúnmente llamado chinche apestoso, el Ayuntamiento quiere comunicar a la ciudadanía que se trata de una especie que no es perjudicial para la salud de las personas ni de los animales.
El Halyomorpha halys es una especie de chinche que se alimenta de vegetales y cuando se ve amenazado desprende un fuerte y desagradable olor como mecanismo de defensa. En otoño, inician la hibernación en edificios y construcciones, motivo por el cual se ha detectado la infestación.
El Ayuntamiento ha consultado con la Diputación Foral de Bizkaia y con la empresa especializada en control de plagas con la que trabaja habitualmente, y ambas coinciden en que el control de este insecto no es sencillo. La empresa señala que teniendo en cuenta que no supone un riesgo para la salud, no es recomendable ni eficaz la fumigación en zonas abiertas de forma masiva. Tampoco los insecticidas caseros resultan muy efectivos, por lo que recomienda colocar barreras físicas: sellar orificios con silicona y proteger puertas y ventanas para evitar que el insecto acceda a las viviendas.
Según la empresa consultada, la proliferación de este insecto, hasta ahora desconocido en la zona, puede tener su origen en las condiciones climatológicas del último año, que han favorecido su reproducción exponencial en las zonas de vegetación. A medida que llegue una climatología más invernal se espera que las molestias ocasionadas por el chinche apestoso desaparezcan. Recuerda que, aunque resulta desagradable para las personas y puede dañar cultivos, estos insectos no suponen un riesgo para la salud de las personas ni de los animales.
