Durango quiere dar a conocer las mejoras realizadas en uno de los símbolos de la villa: el pórtico de la basílica de Santa María. Para ello, ha organizado una exposición que explica las obras de rehabilitación llevadas a cabo, y que se podrá visitar en el vestíbulo de San Agustín.
Durante la pasada Azoka la muestra se ubicó en el espacio enrejado del pórtico. Ante el éxito de la exposición la han trasladado al vestíbulo del espacio cultural de San Agustín, para que pueda ser visitada durante un mes, los días que esté abierto por función.
Las obras promovidas por el Ayuntamiento han supuesto una inversión de 900.000 euros. Además del cambio de iluminación y del retejo de la cubierta, la parte menos visible de la obra ha sido realmente la más importante. Así, el objetivo de esta exposición es precisamente visualizar los trabajos realizados sobre el entramado de la madera, y mostrar la importancia y dificultad de dicha labor de rehabilitación.