Un radar de tramo controlará la velocidad en la A-8, concretamente en Saltacaballo a partir de este verano. La naturaleza de estos dispositivos es muy diferente a la de los radares fijos puesto que se trata de un sistema de cámaras que calcula la velocidad media de cada vehículo en un tramo de carretera.
En esta ocasión, sustituirá a los dos cinemómetros actuales y podría fijar el límite a 100 km/h en un trayecto de entre tres y cinco kilómetros.
Cerca de 50.000 vehículos pasan por este tramo de la autovía del cantábrico cada día y aunque la siniestralidad en la zona haya bajado considerablemente, la DGT ha querido reforzar la seguridad vial obligando a mantener una velocidad moderada en un tramo especialmente peligroso.
Hemos hablado con la ciudadanía y esto es lo que opinan al respecto:
