El movimiento de pensionistas de Bizkaia y Navarra a continuado con sus actos de manifiesto en la puerta del Ayuntamiento de Bilbao. Mantienen su demanda a favor de una pensión mínima de 1080 euros en conjunto de un reclamo por un servicio de sanidad de mejor calidad.
El movimiento de pensionistas arranca el mes de mayo con su habitual concentración para reclamar a los Gobiernos de la Comunidad Autónoma Vasca y Navarra unas pensiones públicas dignas. Para ello tienen previsto emplazamientos a todas las instituciones y un contacto persistente con las organizaciones de Álava, Guipúzcoa y Navarra.
Los gobiernos escucharon sus razones y reconocieron su legitimidad pese a no adoptar compromisos concretos, según nos ha contado Carlos Ruiz, uno de los portavoces del movimiento de pensionistas, el cuál ha ampliado más detalles tras los recientes resultados de las elecciones en Euskadi.
