El Arenal se ha llenado de puestos ambulantes durante la Aste Nagusia, estos puestos no cumplen ningún tipo de control sanitario, mientras que las txosnas pasan constantemente controles sanitarios rutinarios.
Desde el área de salud y consumo, vigilan y controlan que se cumplan las medidas sanitarias en cada txosnas, bar, barra y cada zona donde se va a consumir tanto comida como bebida. Que este todo el etiquetado en perfecto estado, que la elaboración sea correcta y que los frigoríficos estén en temperatura adecuada.
Para que estas medidas puedan llevarse a cabo con éxito, antes de las fiestas se imparten unos cursos gratuitos de manipulación de alimentos para que personas que no tengan estos conocimientos puedan estar perfectamente capacitadas para realizarlos. Desde el ayuntamiento piden no consumir en puestos que no estén homologados, debido a que se pueden estar consumiendo productos con los que estemos poniendo en juego nuestra salud.