El Ayuntamiento de Bilbao acaba de finalizar las obras de la última fase de mejora de la calle San Francisco, en concreto, el tramo comprendido entre Conde Mirasol y la Plaza de los Tres Pilares. En total, un ámbito de aproximadamente 2.000 metros cuadrados ya que también ha incluido trabajos de reurbanización en la calle Cantalojas, entre Cortes y San Francisco.
Esta actuación se ha desarrollado en los últimos seis meses y a ella se ha destinado un presupuesto de 1.028.430,35 euros (IVA incluido).
La calle San Francisco se extiende a lo largo de unos 755 metros de longitud entre la Plaza de los Tres Pilares y la Plaza Zabalburu. En la mayor parte de su extensión –así como en algunas de las calles transversales–. Unos trabajos que han tenido como objetivo la mejora del entorno urbano, a través de aceras más amplias que garanticen la accesibilidad y la reducción del impacto del tráfico rodado, por medio de una plataforma única a nivel de acera y vial y reduciendo la calzada a un carril único de circulación.
El proyecto que ahora finaliza ha abarcado los últimos 160 metros de la vía, además de unos 45 metros de la calle Cantalojas. Y se ha abordado con la misma solución tanto estética como funcional, que el resto de la calle.
Se han renovado firmes y pavimentos en todo el ámbito; se ha sustituido toda la red de alumbrado, incluyendo las propias farolas y luminarias –tipo LED–; y se han instalado nuevas canalizaciones de saneamiento, fecales y pluviales.
Asimismo, se ha modernizado el mobiliario urbano, replicando el ya colocado en las fases anteriores de obra. En este sentido, se ha mantenido la zona estancial de la calle San Francisco, en su intersección con la Plaza Tres Pilares.
Mejorar la calidad de vida
La última fase de renovación de la calle San Francisco se enmarca dentro del Plan Zubirik, que tiene una previsión de inversión de 7,3 millones de euros para mejorar la calidad de vida de las personas que residen en Bilbao La Vieja, San Francisco y Zabala.