El camino de Julen Guerrero como entrenador de la SD Amorebieta ha llegado a su fin de manera abrupta y sorpresiva. Ayer, el club vizcaíno ha anunciado la destitución del técnico tras solo diez jornadas en el banquillo, marcadas por una alarmante falta de resultados. La última derrota, un contundente 3-0 frente al Tarazona, ha sido el golpe final que ha llevado a la junta directiva, encabezada por Jon Larrea, a tomar la difícil decisión.
Con solo una victoria, tres empates y seis derrotas, la situación del equipo es crítica. El Amorebieta se encuentra en la última posición del grupo I de la Primera Federación, una circunstancia que, sin duda, contrasta con las expectativas de un club que busca regresar a la Segunda División. La presión sobre Guerrero se intensificó a medida que las semanas avanzaban y el juego del equipo mostraba una falta de rumbo preocupante.
La junta directiva ha comunicado que esta decisión dolorosa se toma con el objetivo de revertir la trayectoria del primer equipo y buscar un cambio en su rendimiento. “Necesitamos un punto de inflexión”, afirma el comunicado del club, enfatizando la urgencia de la situación actual. Mientras tanto, ya están en marcha las gestiones para encontrar un nuevo entrenador que pueda reencaminar al equipo en el próximo encuentro, programado para el domingo contra la Cultural Leonesa.