Las comunidades de Euskadi, Cataluña, Aragón, Navarra y Baleares han acordado restringir los movimientos de ganado para contener la lengua azul, una enfermedad que afecta a vacas y ovejas, pero no a personas. Las restricciones se aplican por zonas delimitadas según directrices del Ministerio de Agricultura y Pesca, y permanecerán hasta que haya vacunas suficientes o termine el periodo de riesgo estacional.
Se distinguen dos tipos de áreas: zonas con circulación vírica confirmada, donde los animales deben superar pruebas PCR, y zonas sin circulación vírica, donde se aplican medidas menos restrictivas. Los animales vacunados y con PCR negativa (válida por 10 días) podrán moverse, siempre cumpliendo con la desinsectación de vehículos 48 horas antes del traslado. Estas normas afectan a terneros destinados a cebaderos, trashumancia, reproducción y reposición. Cada comunidad revisará y comunicará posibles cambios según la evolución de la enfermedad y la disponibilidad de vacunas.
El objetivo común es minimizar los riesgos y mantener un control efectivo del serotipo 8, especialmente en las zonas más vulnerables. Esta colaboración entre comunidades autónomas refuerza la prevención en el sector ganadero, clave para evitar la expansión de nuevos focos.