El Surne Bilbao Basket inició la segunda fase de la FIBA Europe Cup con una trabajada victoria por 89-91 ante el Banco di Sardegna Sassari. A pesar de dominar gran parte del encuentro y alcanzar ventajas de hasta 18 puntos, los bilbaínos vivieron un final de infarto tras un intenso último cuarto.
El conjunto dirigido por Ponsarnau mostró un sólido comienzo gracias al liderazgo de Tomasz Gielo, quien impulsó a su equipo con 12 puntos y 4 rebotes. Junto a Dragic y Kullamae, los hombres de negro sorprendieron al equipo local con un parcial inicial de 0-7. Sin embargo, el Dinamo reaccionó con acierto desde la línea de tres, cerrando el primer cuarto a solo tres puntos de distancia (18-21).
En el segundo cuarto, los sardos aprovecharon ciertas desconexiones de los bilbaínos para ponerse por delante en el marcador. Bendzius y Halilovic fueron claves en este tramo, pero el Bilbao Basket recuperó el control gracias al acierto de Frey, quien cerró la primera mitad con un espectacular triple para poner el marcador en 41-51.
Incertidumbre
Tras el descanso, los hombres de negro ampliaron la ventaja con una racha anotadora que llegó a los 18 puntos de diferencia. No obstante, el Sassari, efectivo desde el perímetro, recortó distancias para dejar el encuentro abierto al final del tercer cuarto (64-71).
El último cuarto se convirtió en un intercambio constante de emociones. Dragic cometió un doble error que culminó en su salida del partido por faltas, complicando el tramo final para los bilbaínos. Con el marcador en 80-87, los locales firmaron un parcial de 6-0, apretando el resultado hasta un ajustado 86-87.
En los instantes decisivos, Hlinason asumió la responsabilidad con una canasta y dos tiros libres cruciales que sellaron la victoria número 100 de los bilbaínos en competiciones europeas. Ahora, el equipo ya piensa en su próximo reto: el derbi del domingo.