El Departamento de Educación del Gobierno Vasco ha iniciado un procedimiento para resolver el concierto educativo del colegio Scientia de Bilbao, debido a las irregularidades continuadas a la hora de cumplir los requisitos acordados.
La Consejería ha detectado impagos a trabajadores y deudas con proveedores, lo que ha desencadenado esta decisión. Algunos de esos impagos vienen desde febrero y aplican, especialmente, a aquellos que no están amparados por el pago delegado proveniente del gobierno. Esto no solo afecta al profesorado, también a las empresas de catering del comedor o las empresas suministradoras de los materiales escolares e informáticos.
Estos problemas han afectado también a otros colegios del mismo grupo como el de San Sebastián.
Las familias podrán reubicar a sus hijos en otros centros educativos antes del 8 de enero. El profesorado y otros trabajadores, sin embargo, se sienten “vendidos” y a manos de una empresa privada “sin liquidez”. “No sabemos cómo reaccionar ante esta situación porque ni siquiera habíamos valorado siquiera esta posibilidad”, ha dicho la portavoz de este grupo.
El lunes está prevista una reunión con un gabinete jurídico para ver de qué forma abordarán esta situación.
