La figura de Álvaro Djaló genera debate entre los aficionados y los analistas deportivos. El jugador, que llegó con grandes expectativas y que en pretemporada dejó destellos de calidad, no termina de asentarse como un indiscutible en el equipo. En el programa Bilbosport de Telebilbao de este pasado lunes, Edu Velasco, Perillas, Borja Conde y Jon García ponían en evidencia las dudas sobre su rendimiento.
En los últimos meses, ha tenido oportunidades con minutos de calidad —no simples minutos de la basura— y ha demostrado algunos chispazos, como su decisivo gol de cabeza contra el Celta, que valió tres puntos. Sin embargo, en el partido más reciente, su actuación dejó más dudas que certezas: fallos en controles, pérdidas de balón evitables y decisiones erráticas han ensombrecido su desempeño.
Expectativas y realidad
Al inicio de la temporada, se esperaba que fuese un jugador diferencial, alguien capaz de desbancar a titulares consolidados como Berenguer o Guruzeta. En pretemporada, se le vio comprometido y con actuaciones prometedoras que ilusionaron a los aficionados. Incluso aquellos que le vieron en directo destacaban su energía en el campo y su capacidad para imponerse en duelos individuales.
Sin embargo, la realidad de la competición ha sido distinta. Djaló ha pasado por periodos de inactividad, con hasta tres partidos consecutivos sin jugar, posiblemente como medida para darle un revulsivo emocional y táctico. En su regreso al once, no logró convencer del todo, mostrando un rendimiento inconsistente.
Por ejemplo, Jon García cree que esta etapa es parte del proceso de adaptación, un periodo necesario para que encuentre su mejor versión en el equipo. El exfutbolista piensa que en enero podría tener un papel importante en partidos clave, como en Logroño o en la Supercopa, donde se espera que demuestre la calidad que llevó al club a apostar por él.
Mientras tanto, nos mantenemos expectantes, conscientes de que el potencial está ahí, pero también de que el tiempo apremia. Quedan muchos partidos por delante para que el ex del Braga demuestre si puede ser ese jugador diferencial que tanto se esperaba.
El contraste con otros jugadores
Lo que Álvaro podría aportar se contrasta con las actuaciones de jugadores como Berenguer, quien ha sido regular y determinante en momentos clave. Las comparaciones son inevitables, y es ahí donde él aún no ha conseguido dar el paso necesario para asentarse como titular indiscutible.
El mensaje es claro: el talento no se pone en duda, pero la constancia y la capacidad de decisión en el terreno de juego serán claves para determinar su éxito. ¿Veremos en los próximos meses al Djaló que todos esperaban? Solo el tiempo lo dirá.