Una vecina de 91 años ha sufrido en solo diez días un intento de robo y un hurto en su domicilio. La hija alerta a los mayores para que extremen las precauciones.
Los robos en el barrio de Rekalde, en Bilbao, han puesto en alerta a los vecinos, especialmente a las personas mayores. En solo 10 días, la madre de Pilar, una mujer de 91 años, ha sufrido dos intentos de robo, uno de ellos con éxito.
El último robo ocurrió ayer jueves en su portal de la calle Moncada. La mujer entró al portal y se encontró con dos hombres nacionales. Como es temerosa, dejó subir a uno de ellos mientras el otro se quedó abajo. Este último le dijo que era antenista y que, debido al viento, había viviendas en las que la televisión no funcionaba bien. La mujer confió en él y subió con él en el ascensor hasta el noveno piso, ya que el supuesto técnico le aseguró que comenzaría su trabajo desde arriba.
Al poco tiempo, el hombre llamó a su puerta y ella le dejó entrar. Lo primero que hizo fue dirigirse a la sala, donde revisó la zona del router y desconectó la televisión sin que la mujer se diera cuenta. Luego le mostró que la pantalla no se veía y le pidió que le indicara dónde estaba la toma de antena. Esta se encontraba en la habitación de la víctima, por lo que el ladrón se dirigió hasta allí y le pidió que en el salón ella cambiara de canal para comprobar la señal. Mientras tanto el ladrón aprovechó para robar el dinero de su pensión que había retirado ese mismo día y varias joyas.
Tras esto, volvió a la sala, reconectó la televisión y le dijo a la mujer que el problema estaba solucionado. Más tarde, cuando su hija Pilar llegó a casa, la mujer le contó lo sucedido y fue entonces cuando se dieron cuenta del robo.
El primer robo
No era la primera vez que intentaban robarle. Hace 10 días, al entrar en el portal, una mujer de nacionalidad rumana la siguió y le felicitó el año. Luego, hizo un gesto con la mano en dirección a su cuello, pero la víctima creyó que intentaba abrazarla y la apartó, diciéndole que no la conocía.
Pilar ya ha denunciado y ha querido hacer un llamamiento a los mayores del barrio y a sus familias para que no abran la puerta a desconocidos ni dejen entrar a nadie en sus casas. Además, pide a los hijos e hijas que estén pendientes de sus padres y refuercen su seguridad para evitar que vuelvan a ocurrir situaciones como esta.
