Renfe ha denunciado la agresión a dos viajeros el pasado 7 de febrero en la estación de Ollargan, en la línea C3 de Cercanías Bilbao. Un grupo de grafiteros, que se encontraba pintando un tren, atacó a las víctimas mientras estaban en el andén.
Un vigilante de seguridad acudió rápidamente al lugar y observó a al menos diez personas en las vías. Renfe solicitó asistencia sanitaria para los heridos y la intervención de la Ertzaintza, que trasladó a las víctimas al Hospital de Basurto para su observación.
La compañía ha anunciado que presentará una denuncia formal por los daños ocasionados y entregará a las autoridades las imágenes de las cámaras de seguridad, donde se pueden ver los hechos y la agresión.
Renfe ha condenado este tipo de actos violentos y ha asegurado que seguirá trabajando para reforzar la seguridad en sus estaciones. En Ollargan, se instalarán nuevas cámaras de videovigilancia, dentro del Proyecto RS3, para mejorar la prevención y protección tanto de los usuarios como del personal.
