La Ertzaintza ha detenido a un hombre de 31 años, empleado de un establecimiento de Barakaldo, acusado de sustraer 32 teléfonos móviles de última generación y venderlos en comercios de compra-venta de Bilbao. El valor total del material robado asciende a 34.617 euros.
El pasado 4 de febrero, la Ertzaintza recibió una denuncia por el robo de numerosos dispositivos móviles en un comercio de distribución electrónica de consumo. Tras realizar un inventario, la empresa descubrió que faltaban teléfonos de alta gama y sospechó que podría tratarse de un hurto interno. Para facilitar la investigación, la compañía entregó a los agentes el IMEI de uno de los dispositivos sustraídos.
Una investigación que apuntaba al empleado
La investigación policial, realizada por agentes de la Ertzainetxea de Sestao, reveló que los móviles robados habían sido vendidos en dos comercios de compra-venta de segunda mano en Bilbao. Las pesquisas identificaron como sospechoso a un empleado del área de telefonía, que llevaba algo más de un año trabajando en el establecimiento.
Según las investigaciones, el acusado sustrajo los dispositivos entre marzo de 2024 y enero de 2025. Entre ellos había 32 móviles de gama alta y un reloj inteligente, que posteriormente vendió en el mercado de segunda mano.
Recomendaciones de la Ertzaintza
La detención del acusado tuvo lugar el pasado lunes 10 de febrero, por un delito de hurto. La Ertzaintza mantiene la investigación abierta y ha recomendado a la ciudadanía que, en caso de sufrir un robo, incluya en la denuncia el número IMEI del terminal. Este dato es fundamental para localizar dispositivos sustraídos y resolver este tipo de casos.
