Los vecinos de la calle Mariano Ciriquiain en Portugalete respiran aliviados tras recuperar la normalidad. La Policía Local ha desalojado esta mañana la vivienda ocupada, retirando las pertenencias de dos ocupas que permanecían en su interior. Los objetos han sido trasladados a sede judicial, donde permanecerán custodiados hasta que se decida su destino. De esta forma, los propietarios podrán acceder a la vivienda en las próximas horas.
La colaboración vecinal y la acción policial han sido claves para resolver el conflicto de forma rápida y pacífica. La labor de negociación con los ocupas permitió que abandonaran la vivienda antes de una multitudinaria concentración vecinal. Sin embargo, las pertenencias que dejaron dentro obligaron a esperar la autorización judicial para culminar el desalojo.
Después de cinco días de tensión, la normalidad regresa a la calle Mariano Ciriquiain. Ya no hay presencia policial permanente ni pancartas de protesta en la zona. Los vecinos celebran el final de este episodio y confían en que no vuelva a repetirse.
