Jon Elorza, getxotarra que trabaja como entrenador de porteros en el club de fútbol Johor FC de Malasia, estuvo ayer en el programa deportivo Bilbosport de Radio Nervión, donde compartió su experiencia en el fútbol malayo, la rápida adaptación de los jugadores españoles y su visión sobre el crecimiento y desafíos del fútbol en este país del sudeste asiático. Tras llevar trabajando en el país cinco años, Elorza nos detalló su visión sobre un club que se ha consolidado como una de las potencias en la región, participando incluso en la prestigiosa Champions asiática.
El Johor Darul Takzim o simplemente JDT FC, es propiedad del Sultán Ibrahim, un príncipe local, y se ha convertido en el club más destacado de la Superliga de Malasia en la última década. Jon Elorza nos contó que tras ser adquirido hace ya 13 años, el club ha experimentado un imparable crecimiento, con una impresionante racha de 11 títulos consecutivos de liga, además de 4 trofeos en un solo año, incluyendo la Supercopa, la Liga y la Copa de Malasia.
La plantilla del Johor
Uno de los puntos más destacados en la plantilla del Johor es la continua incorporación de jugadores españoles, que suman un total de 13 en la plantilla, con la reciente incorporación de Samu Castillejo, fichado ayer mismo. Entre los nombres más conocidos se encuentran figuras como Jesé, Jonathan Viera, Roque Mesa, Jordi Amat, Álvaro González y los vascos Zubiaurre y el exrojiblanco Iker Undabarrena, quienes, junto con el propio Jon Elorza, conforman la base del proyecto futbolístico.
El entrenador de porteros, valoró positivamente la llegada de estos jugadores por la calidad y la experiencia que pueden aportar a la liga malaya.
Jon llegó al país gracias a la oportunidad que le brindó un amigo, y aunque inicialmente comenzó trabajando en el segundo equipo, su buen hacer le permitió ascender a la primera plantilla, donde lleva ya más de cinco años.
El getxotarra nos contó también la sorpresa positiva que le causó el país en cuanto a su desarrollo urbano, especialmente en las zonas cercanas a Singapur, que presentan una calidad de vida impresionante, superando las expectativas de quienes visitan la ciudad por primera vez. En particular, mencionó que Johor, la ciudad donde se encuentra el club, es una de las más desarrolladas del país, incluso comparándola con Kuala Lumpur, la capital.
Equipo de Champions asiática
Jon Elorza también tuvo tiempo de analizar la liga malaya, que en su opinión podría compararse con una segunda división española, destacando la gran diferencia de nivel entre los diferentes equipos, lo que provoca una competición muy desigual. En cuanto a la capacidad de los estadios, el entrenador de porteros destaca que estos varían considerablemente, aunque el campo en donde disputan sus partidos como local, alcanza los 35.000 espectadores. Eso sí, nos cuenta que las finales de la liga se juegan en el estadio nacional, con capacidad para 85.000 personas.
Jon aprovechó la entrevista para subrayarnos el impacto que su club tiene tanto a nivel nacional como internacional, ya que su participación en la Champions asiática ha permitido a Malasia estar representada en competiciones de alto nivel. Un torneo que reúne a equipos de todo el continente, incluyendo países como Japón, China, y Arabia Saudita. Aunque el equipo no ha logrado clasificarse aún para la Final Four del torneo, Elorza espera lograrlo este año. En los próximos días jugarán los octavos de final ante un club tailandés, y lo ve como una oportunidad histórica para el club, ya que su presencia en la competición ha permitido visibilizar a Johor en el panorama futbolístico internacional.
Elorza destacó también la escasa presencia de jugadores locales en ligas internacionales. Pocos son los que han salido a jugar fuera de su país, hubo uno jugando en Portugal, pero no ha tenido demasiada fortuna.
Adaptación al nuevo país
A lo largo de su estancia en Malasia, Jon Elorza también ha tenido que adaptarse a las particularidades culturales de un país, que profesa la religión musulmana. Una de las cosas que más le sorprendió al llegar, fue comprobar cómo se interrumpían los partidos de fútbol cuando llegaba la hora del rezo.
El vizcaíno también reflexionó sobre su futuro, señalando que, cuando termine su ciclo en Malasia, le gustaría regresar a Euskadi y seguir trabajando en el mundo del fútbol profesional.
A pesar de estar alejado de su tierra, sigue pendiente de todo lo que hace el Athletic Club. Sin embargo, debido a las 7 horas de diferencia horaria que hay entre Euskadi y Malasia, resulta muy complicado seguir los partidos del club bilbaíno, ya que muchos de ellos se disputan a las 4 de la madrugada.
Por último, Jon Elorza tuvo tiempo de hablarnos sobre los paraísos naturales con los que cuenta Malasia, en donde se pueden encontrar playas de aguas cristalinas y paisajes idílicos, ideales para los amantes de la naturaleza y el turismo sin masificación.
