La prevención es necesaria
La obesidad afecta negativamente a la calidad de vida de las personas que la padecen, ya que desencadena complicaciones tan diversas como dolor articular, dificultad en la movilidad, fatiga o un pobre descanso nocturno. Todo ello, además del propio riesgo que supone para la salud y el estigma que sufren los pacientes a distintos niveles.
Desde la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (Seen) señalan que los factores que la favorecen son muy variados y todos ellos deben ser supervisados. Entre ellos una dieta inadecuada, ingesta excesiva de alimentos de escaso valor nutricional o sedentarismo. También factores como la falta de sueño o el estrés.
Los especialistas también ponen el acento en la importancia de identificar precozmente la obesidad en aquellas personas con tendencia a sufrirla, ya que entre el 40-70% del riesgo a desarrollar obesidad se debe a causas genéticas que implican a varios genes.