Los vecinos de Arangoiti ya se han acostumbrado a ver corzos en la zona. Según explica Julio, oyente de Radio Nervión y un residente del barrio, estos animales «llevan unos dos años por la zona». Se mueven principalmente por la vaguada de Berriz, entre el camino de Berriz y la calle Ramón y Cajal en Deusto, aunque a veces cruzan hacia el barrio de Buenavista, lo que puede generar algún susto en la carretera.
El hijo de Julio se encontró anoche con uno de ellos. «De día están más escondidos, pero a la noche salen a comer«, detalla Julio. Estos inesperados inquilinos ya forman parte del vecindario y su paisaje.
Hervívoros y cercanos a núcleos urbanos
El corzo es un pequeño cérvido originario de Europa y algunas regiones de Asia Menor. Prefiere vivir en zonas boscosas, aunque también se adapta a terrenos abiertos cercanos a núcleos urbanos, como ha ocurrido en Arangoiti. Estos animales son herbívoros y se alimentan principalmente de hierbas, hojas, brotes tiernos, así como de algunos frutos silvestres. Suelen ser más activos durante el amanecer y el atardecer, momentos en los que aprovechan para buscar alimento mientras permanecen ocultos durante el resto del día para protegerse de posibles depredadores.
