
El Athletic Club se llevó un empate trabajado (0-0) del Estadio de La Cerámica, donde los leones tuvieron que sudar para neutralizar a un Villarreal dominador, especialmente en una primera parte que fue un asedio amarillo. El punto permite a los de Valverde mantener la renta de seis puntos sobre el Betis y el Villarreal, sus dos principales perseguidores en la lucha europea, que además se enfrentan en la próxima jornada.
El arranque fue complicado para los rojiblancos. El Villarreal mandó con solvencia y se encontró con un Unai Simón soberbio, que firmó su tercer partido consecutivo sin encajar gol. El guardameta internacional lo paró todo: Cardona, Ayoze y Buchanan lo intentaron sin éxito. Solo un cabezazo de Guruzeta a centro de Gorosabel inquietó algo a los locales. Por el camino, Adama tuvo que sustituir a Yuri, con molestias musculares.
Pese a todo, el Athletic pudo hacer el 0-1 en una contra rápida entre Guruzeta y Nico, pero Iñaki Williams no logró rematar con precisión.
Segunda parte con oportunidades
En la reanudación, los rojiblancos dieron un paso al frente. Ajustaron la presión y apenas concedieron peligro, salvo en dos acciones de Barry, una de ellas anulada por mano tras revisión en el VAR. El tramo final se complicó con la expulsión clara de Gueye por una dura entrada a Maroan. Restaban 9 minutos más 8 de añadido, y el equipo midió con inteligencia los riesgos.
Aún hubo tiempo para dos acercamientos: un disparo de Maroan que sacó la defensa y un cabezazo de Vivian que Junior desvió a córner. Pero el gol no llegó.
En el año en que se cumple el título de Copa, el Athletic da un paso más hacia la Champions. Quedan jornadas, quedan batallas, pero los leones siguen rugiendo en la zona noble. Ahora, toca pensar en el Rangers. Otra cita para valientes.