
El Lehendakari Imanol Pradales ha anunciado que Euskadi entra en una nueva fase de gestión tras el apagón eléctrico que afectó a la comunidad. El LABI ha decidido avanzar a la Fase de Emergencia situación 1, lo que supone que el Gobierno Vasco asume un rol de coordinación y apoyo, mientras que cada institución retoma la gestión directa de sus recursos y servicios.
Hay que mantener la prudencia
Pradales ha advertido que, pese a la mejora, la situación aún exige prudencia. “Debemos actuar con cautela”, ha señalado, al tiempo que ha reconocido la labor del LABI y del Departamento de Seguridad por su rápida actuación y comunicación constante con la ciudadanía.
El Lehendakari ha confirmado que el apagón ha causado daños materiales, pero no ha dejado víctimas, y ha mostrado su apoyo a las personas y empresas afectadas. También ha remarcado que todavía se desconocen las causas del fallo, y ha reclamado una investigación urgente para evitar que vuelva a repetirse.
Buena respuesta ante la emergencia
Pradales ha valorado de forma positiva la respuesta del sistema de emergencias: “Nuestros planes de contingencia han funcionado, especialmente en infraestructuras críticas como hospitales y servicios esenciales”. Aun así, ha insistido en la necesidad de mejorar los protocolos y aprender de lo ocurrido.
El Lehendakari ha cerrado su intervención agradeciendo a toda la ciudadanía y al conjunto de profesionales que han sostenido la respuesta en esta crisis: sanitarios, cuerpos de seguridad, bomberos, técnicos, personal del transporte público y medios de comunicación.