El partido contra el AZ Alkmaar comenzó con mucho movimiento y acción por parte de los rojiblancos, pero ambos equipos se fueron desinflando con el paso de los minutos. No fue hasta el 72′ que Sancet robó un balón y en un pase rápido a Nico Williams que centró a su hermano este abrió el marcador colocando el 1-0.
Siempre Nico
Nico Williams fue indispensable causando problemas al rival en su lateral y su protagonismo en el segundo gol, materializado por Oihan Sancet, fue clara. El conjunto demostró que aunque las cosas no terminaban de salir, la perseverancia tiene premio. Un 2-0 que daba a los leones la primera victoria en la Europa League.
