Las chinches han vuelto y así nos lo han hecho saber los oyentes con sus llamadas y mensajes. La variante esta vez viene con el adjetivo apestosa y es que estos pequeños insectos de entre 10 y 15 milímetros emanan un olor desagradable cuando se sienten amenazadas o nos deshacemos de ellas. No es una especie peligrosa para el ser humano y su alimento favorito son las plantas, de ahí que residan en zonas arboladas y ajardinadas.
Las chinches han sido avistadas en diferentes zonas de Bizkaia como Galdakao, Etxebarri, Durango, Iurreta y Amorebieta. En Bilbao también se han encontrado en los barrios de Otxarkoaga, Txurdinaga y Errekalde, entre otros.
Esta proliferación es temporal y se debe a las altas temperaturas del fin del verano. Su capacidad para volar permite que lleguen hasta las ventanas y se alojen en la zona de la persiana o, incluso, en la ropa que tenemos tendida.
No hay una solución específica para evitarlas. Las mosquiteras pueden ser efectivas para impedir la entrada al hogar así como revisar la ropa en el momento de recogerla.
